Tipos de organización: ideas para estructurar una empresa
¿Conozca los tipos de organización que puede adoptar su empresa? Aquí tienes los principales para elegir el que más le convenga a su negocio
Toda empresa debe tener un sistema de organización empresarial, el cual se puede clasificar en función de varios aspectos dependiendo el ámbito o sector que maneje. Definirlo es importarte, pues según los tipos de organización se estructuran los métodos y procedimientos internos de las compañías. Estos no solo son organigramas plasmados en papel; por el contrario, son la base del funcionamiento del negocio (Pérez, 2021).
En ellos, puede ver la consecución de metas, la distribución de los departamentos, sus funciones y responsabilidades, la cadena de mando, el control, etc. De esta manera, del tipo de organización elegido para su negocio dependerá del análisis y la valoración de las circunstancias, ingresos, número de trabajadores, funciones y otros factores. Por eso, uno de los puntos claves para el éxito de una compañía es tener una estructura óptima (ESAN, 2018).
Estos son seis tipos de organización en los que se puede plantear la estructura de una empresa.
La organización formal, es un tipo de empresa muy bien estructurado, en donde la interacción está regulada de forma legítima. Cuenta con un plan de negocio que incluye la constitución de la misma y sus actividades corporativas. Así como la asignación de roles y responsabilidades, el diseño de departamentos, entre otras (García, 2018; Pérez, 2021).
Se trata de uno de los tipos de organización con tendencia estática y de carácter jerárquica más utilizados. En ella, los participantes aceptan el funcionamiento de acuerdo con una serie de normas existentes. Estas son plasmadas en documentos de carácter oficial conocidos por todos los miembros de la empresa (Pérez, 2021).
La organización informal cuenta con una estructura más dinámica y flexible que está en constante evolución. Se basa en la interacción de los miembros y busca mantener relaciones interpersonales más abiertas. Sus colaboradores son jóvenes y creativos, cuya actitud se regula en función de los objetivos y acuerdos (García, 2018).
Es una empresa que habitualmente se produce de forma espontánea, pero está regulada de alguna manera. Por ejemplo, entre los tipos de organización empresarial que más se constituyen dentro de una estructura informal están (Pérez, 2021):
Es el sistema orientado a conseguir un fin consolidado a partir de grupos de personas cuyos intereses son de cooperación o de colaboración. Tiene como esencia la acción colectiva de origen social para el logro de objetivos comunes.
Esta surge espontáneamente de la interacción de personas y, con frecuencia cuentan con el apoyo o subsidios de otras organizaciones o del Gobierno. Un ejemplo de estos tipos de organizaciones son los ministerios, las iglesias y las Organizaciones No Gubernamentales (ONG), que son independientes y sin fines de lucro (Escobar, s.f.).
Las organizaciones según la forma jurídica que adoptan es una de las clasificaciones más usuales. Estos tipos de organizaciones se presentan en empresas con ánimo de lucro, y se refiere al tipo de sociedades comerciales que se pueden dividir en varios aspectos según: su objeto social (sociedades civiles o mercantiles), división del capital, participación del estado (sociedad estatal, mixta o privada), ley de constitución (sociedad nacional o extranjera), origen del capital (sociedad nacional, mixta o extranjera). Así mismo, las sociedades se pueden dividir de acuerdo con la Ley, dependiendo de la responsabilidad asumida por sus socios o accionistas, así: (Pérez, 2021; MH Education, s.f.; Alegra, 2017):
Los tipos de organización empresarial según su tamaño se pueden clasificar según el artículo 43 de la Ley 1450 de 2011, en micro, pequeña, mediana y gran empresa, utilizando uno o varios de los siguientes criterios:
Según la actividad económica en la que se encuentre la empresa, entendiéndose por empresa, toda unidad de explotación económica, realizada por persona natural o jurídica, en actividades agropecuarias, industriales, comerciales o de servicios, en el área rural o urbana, de acuerdo por lo indicado en el artículo 43 de la Ley 1450 de 2011.
Conocer estos tipos de organización es esencial para el correcto funcionamiento de una empresa. Su definición puede ayudar a estructurar los métodos y procedimientos internos, así como la forma óptima de trabajar. Dependiendo de sus criterios de clasificación, se pueden centrar según su actividad formal e informal, tamaño, aspectos jurídicos y sector económico. Lo ideal es informarse acerca de ellos antes de tomar decisiones importantes para su negocio.
Referencias Bibliográficas